La jefa de la Oficina Defensorial de Arequipa, Andrea Sarayasi Tejada, descartó la inclusión de presupuesto para el 2026 en el tratamiento de la emergencia por la contaminación de las aguas del río Tambo (Islay). Es decir, más de 50 mil pobladores del valle de Tambo seguirán consumiendo por dos años agua combinada con metales pesados.
Explicó que desde la Defensoría del Pueblo se reportó el estancamiento de las altenativas de solución tanto en la región Moquegua como en Arequipa, las cuales no dieron ningún fruto durante los tres años que duró las declaratorias de emergencia sanitaria por los estragos dejados por el Grupo Aruntani.
“En la mesa de gestión de riesgos y desastres el Gobierno Regional de Arequipa (GRA) reconoció que la emergencia no estuvo acompañado de una respuesta real. Intentaron de forma paliativa llevar agua en cisternas a la población y colegio, pero no tuvo resultados debido a que no todos se beneficiaron”, detalló.
CRISIS. Sarayasi Tejada lamentó el fracaso del GRA en la contratación de ocho plantas de ósmosis inversa a fin de descontaminar las aguas del río Tambo, proyecto que no alcanzó sus objetivos desde la primera instalación. Acotó que esta problemática estaría en manos de la nueva gestión de Gobierno que ingrese en el 2026.
“Se hablaba de una reserva de Tambo Bajo sin nada claro, no sabemos quién se encargará de estos trabajos, esperemos que el nuevo Gobierno entre con soluciones”, detalló.