La disputa entre la Junta Nacional de Justicia y el Poder Judicial escaló el 14 de noviembre, cuando vencía el plazo de 48 horas para reponer a Delia Espinoza en sus cargos. La tensión creció luego de que el juez Juan Torres Tasso confirmara que la JNJ interpretó de manera indebida la medida cautelar y mantuvo la suspensión de la magistrada.
“Se ordena a la entidad emplazada, Junta Nacional de Justicia, cumpla con reponer a doña Delia Milagros Espinoza Valenzuela, en el cargo de Fiscal de la Nación (…) bajo apercibimiento de ley”, resolvió el magistrado al advertir sobre las consecuencias penales del incumplimiento.
El conflicto se originó cuando los consejeros —encabezados por el sentenciado por violencia familiar Gino Ríos Patio— alegaron que la orden judicial solo dejaba sin efecto dos de los cuatro cargos atribuidos a Espinoza. Sin embargo, el juez refutó esa postura y subrayó que todos los hechos están relacionados y por lo tanto suspendidos.
El magistrado precisó que la JNJ incurrió en “interpretación unilateral y autónoma”, vulnerando la Ley Orgánica del Poder Judicial. Torres Tasso recordó que la resolución debía cumplirse “en sus propios términos” y que cualquier restricción constituía desacato, por lo que informó al Ministerio Público sobre la conducta de los consejeros.
Trascendió que Delia Espinoza acudiría este viernes a la sede de la Fiscalía en espera de ser reincorporada. Si la JNJ no cumple con la disposición antes de la medianoche, los consejeros podrían ser denunciados penalmente por desobediencia a la autoridad, profundizando la crisis del sistema de control institucional.