Por 14 días más se retrasaría la extradición del expresidente Alejandro Toledo. Su defensa presentó nuevos recursos legales que buscan evitar a la justicia norteamericana que, previamente, le ordenó al exmandatario entregarse ayer viernes a las 9 de la mañana al dar por terminada su libertad bajo fianza.
A Toledo Manrique básicamente se le investiga por presuntamente recibir sobornos de Odebrecht. Ello data desde la época de su mandato presidencial (2001-2006). Durante los últimos años, el expresidente de la república, junto a otros colegas se encuentra en la mira de la justicia.
Sin embargo, todo haría indicar que los recursos legales de la defensa de Toledo solo conseguirán ganar tiempo y el camino a extradición de todas formas continuará.
Así acaba el camino del otrora líder de Perú Posible, quien en su momento encabezó la lucha contra la dictadura de Alberto Fujimori. Ahora Toledo también está en manos de la justicia al igual que su anterior rival político.
Por momentos también se habla que Toledo sería colaborador eficaz. Tras esta información, muchos personajes políticos comenzaron a sudar frío, pues se verían destapadas más irregularidades. Esto dependerá de la posibilidad que el exmandatario logre frenar su extradición.
Sea cual sea el destino de Alejandro Toledo Manrique, lo único cierto es que se trata de un final lamentable para una trayectoria política que en su momento representó la lucha frontal contra la dictadura y la corrupción. Ahora ese mismo manto alcanza al denominado “sano y sagrado”. Esperemos solamente que sea la justicia castiga en la misma magnitud la responsabilidad que pudo tener en los diversos actos de corrupción que envolvieron al país durante el primer quinquenio del siglo XXI.