Conmemoramos un nuevo Día de Todos los Santos con la finalidad de recordar a nuestros seres queridos que de manera física descansan en los diferentes cementerios de nuestra ciudad. Esta fecha permite que las familias se reencuentren de un modo u otro con quienes tuvieron que partir hacia el otro mundo. Sin embargo, se les tiene presentes en la memoria colectiva recordando sus buenas acciones y lo importante es que fueron para quienes ahora siguen su ejemplo.
De igual forma, los camposantos estarán llenos de personas que aprovechan este feriado para obtener un ingreso adicional. Tenemos a quienes venden los diferentes productos relacionados con la festividad como coronas, arreglos florales, recipientes con agua, etc. También a las personas que, a cambio de una propina, realizan pequeñas ceremonias de homenaje a los difuntos. La finalidad es dar el respaldo de fe para que esa persona pueda mantenerse en paz.
Nuevamente los cementerios estarán rebosantes de público que de una u otra manera recordará a sus seres queridos visitándolos en su tumba bajo tierra o en su nicho, no olvidemos a los más pudientes con su mausoleo. Sin embargo, el común denominador será siempre acordarse de lo bonito que fue vivir al lado de quienes ya no nos acompañan físicamente.
Esperemos que no solo esta fecha sirva para que recordemos a nuestros seres queridos, sino que los mantengamos presentes en nuestra memoria y nuestro corazón todo el tiempo. Solo así lograremos que no mueran del todo y que sigan vigentes ante la sociedad y en el recuerdo colectivo.
Que esta festividad de Todos los Santos sirva como reflexión para respetar la vida. Valoremos mejor a quienes tenemos a nuestro lado y nunca dejemos de recordar aquellos que ya partieron, pues de un modo de otro viven dentro de nosotros con todos los actos de buena voluntad que hicieron para que salgamos adelante.
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