Arequipa en este año 2023 recibió nuevas autoridades en el gobierno regional y en los municipios provinciales y distritales. Todas tenían muchas ganas de transformar la región en un grandiosa economía y dar desarrollo a los más de 1.3 millones de arequipeños, criticaban lo que no hicieron las anteriores gestiones y que ahora era momento de demostrar cómo se gobierna a favor de los electores que dieron su voto.
No obstante, pasaron casi 12 meses y esas metas del gobernador, consejeros, alcaldes y regidores son invisibles, no hay mayores proyectos desarrollados a favor de las provincias, parece que olvidan que solo tienen cuatro años de gobierno, por tanto deberían tener primeros inicios de obras (y no solo nos referimos a aquellas de cemento) para que sean inauguradas en el año 2026.
Es un año lamentable para las instituciones gubernamentales porque la Fiscalía y Policía Anticorrupción hicieron inspecciones a las gestiones que recién iniciaban.
Asimismo, durante campaña electoral recordamos que los candidatos, hoy autoridades, sacaban pecho de tener dentro de sus equipos a técnicos profesionales talentosos e intelectuales, pero a la hora de la hora en las gerencias duraban casi nada y los sacaban. Luego advirtieron que sin aumento de sueldos ningún excelente servidor puede trabajar.
En las obras se aprecian demoras y una lentitud similar al andar de las tortugas. Si alguien pregunta ¿qué obra es la que más resalta de todas las autoridades? La gente recordará Bicentenario o autopista Arequipa-La Joya, pero porque parece que su final está muy lejano.
Sumado a este tema, el fenómeno El Niño se acerca, las autoridades ¿sabrán afrontarla? o ¿culparán a ese tema climático de sus malas gestiones?