La polémica nuevamente se instaló en el gobiernod de Dina Boluarte. Esta vez, fue su expremier, Alberto Otárola, quien confesó que la mandataria se sometió a un retoque estético a través de una rinoplastia. Aunque el hecho no representaría algo muy dañino para salud, de ser cierto, resultaría en algo que agravaría la crisis política del país por sus implicancias.
Con esta versión de Otárola Peñaranda, se estaría confirmando lo que en su momento fue un secreto a voces. Dina Boluarte se ausentó de las labores presidenciales sin dar previo aviso y por ello estaría incurriendo en una falta. Recordemos que la Constitución señala que el jefe de Estado debe informar sobre una ausencia del cargo, en este caso el poder recae en sus vicepresidentes. De no contar con ellos, quien asume la presidencia es el titular del Congreso.
Nada de ello sucedió. Dina Boluarte se habría ausentado para guardar descanso del caso tras la intervención quirúrgica. Frente a ello, Otárola refirió que el contacto nunca se perdió. De igual manera, uno de los abogados defensores de la presidenta, Ernesto Blume, descartó que la operación sea suficiente motivo para buscar una sanción contra la jefa de Estado.
Esta situación ya quiere ser capitalizada por las fuerzas opositoras. Se impulsa una moción de vacancia contra Dina Boluarte debido a una presunta ausencia no justificada de la presidencia. Veremos si tendrá éxito, aunque ya comenzó a alterar la poca tranquilidad ejecutiva y amenaza con aumentar su tamaño como una bola de nieve.
La presidenta tendría que aclarar este tema. Caso contrario, las dudas alimentarán la polémica sobre ciertos “retoques”.