Honores al soldado ejemplar de nuestra historia, Miguel Grau Seminario, quien en él cumplimiento de su deber con la patria, brindó su vida, un día como hoy, en el año 1879, durante el Combate de Angamos.
Nuestro ilustre marino solía repetir una frase que evoco porque resume él debe ser de quienes llegan a niveles privilegiados de sabiduría, generosidad y humildad: “Un solo norte, el deber, tan sólo un rumbo, el honor”.
La historia nos enseña que dar la vida por la patria, es sólo un peldaño más en la jornada cotidiana de quienes se forjaron en las canteras del amor a la patria y el respeto irrestricto a la legalidad, al prójimo y a su sociedad.
Al evocarlo hoy, meditemos lo grande que sería nuestro querido Perú, si los 63 presidentes que hemos tenido, desde José de la Riva Agüero hubiesen emulado a Grau.
Nuestra presidenta, por ejemplo, ratificó el lunes 5 que su gobierno desconoce los senderos del deber y el honor al pedirnos que no respondamos llamadas telefónicas de desconocidos, para evitar las extorciones y el sicariato. Quizá, su siguiente consejo sea ocultarnos bajo la cama para evitar que los sicarios nos maten por no pagarles cupos.
La presidenta olvida que el Estado debe proteger a su pueblo de los criminales, con políticas de estado eficientes y coherentes, que aglutinen a todas las instituciones públicas. El sicariato ya mató a 1138 varones y 133 mujeres, en los primeros 8 meses del año.
Nuestra policía carece de la profesionalización adecuada, de las herramientas y tecnología para vencer a los bandoleros. El nivel de mediocridad de los congresistas es tan serio que los Códigos Penal, Procesal Penal y ley orgánica de la Fiscalía resultan tan alejados de nuestra realidad, que ayudan a que sólo el 2 % de las personas que detienen los policías, sean internados en alguna de las 69 cárceles hacinadas del país.
Sumemos a ello, que la presidenta del Poder Judicial, Janet Tello, precisó que al 31 de agosto la carga procesal en el poder judicial supera los 5 millones de expedientes, de los cuales, 3 958 767 están en procesos de ejecuciones de sentencias que no se cumplen.
En reciente encuesta, el 56 % del pueblo considera que el principal problema del país es la delincuencia. Ilustro este nefasto panorama, precisando que este año, 25 ciudadanos de cada 10 mil, en el distrito de Pataz, han sido asesinados por el sicariato generado por el oro ilegal.
En las últimas décadas el pueblo languidece en sus valores sustantivos, lo cual explica que 9 de los últimos 12 presidentes, o fueron condenados o están sufriendo procesos penales. La efeméride es propicia para evocar a Miguel Grau, para que los compatriotas valorativos se suban al coche de la gobernabilidad en el 2026 y nos lleven a mejor puerto.
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