Bastaron 24 horas para que las intensas lluvias pusieran en jaque a la región Arequipa, por la falta de obras de prevención, pese a que las tragedias se repiten cada año. Ahora urge apoyo inmediato de todos los frentes para la provincia de Castilla, sus distritos Choco, Chilcaymarca, Chachas, entre otros, han sido aislados total o parcialmente debido a que los deslizamientos dañaron las principales vías de comunicación.
Esta situación volvió a desnudar las falencias de nuestras vías de comunicación en las provincias. Las fuertes lluvias en zonas altas por algunas horas afectaron carreteras que eran el único canal de comunicación para distritos alejados de las manos del Estado peruano.
Prueba del mal estado de las vías, incluso antes de las lluvias, es que la maquinaria no puede llegar a la zona del desastre para la entrega de ayuda humanitaria. La geografía tampoco ayuda pues impide que el helicóptero pudiera aterrizar. Ello obligó a recurrir a una ruta más larga con la consecuencia de no abastecer de primera mano a la ciudadanía.
Resulta también lamentable que solo cuando haya desastres naturales volteemos a ver estas localidades. Sus necesidades son de todos los días y por ello las autoridades deben preocuparse más en mejorar las vías de comunicación. Además se requiere llevar el desarrollo con mejor infraestructura educativa y comunal. Así tendrán más oportunidades de combatir la inclemencia de la naturaleza.
Si no nos preocupamos en lo que pueda pasar con estas zonas alejadas de la región no tendremos un desarrollo completo de Arequipa y la sociedad en general. Que estos episodios de lluvias intensas queden en algo aislado. Nuestras autoridades también deben asumir este compromiso y se logre responder con seguridad y celeridad ante la emergencia que dejan nuestras precipitaciones en los primeros días de este año.
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