Han pasado seis meses desde la última vez que la presidenta Dina Boluarte declaró directamente ante los medios de comunicación. Fue a inicios de abril del presente año, cuando la mandataria apareció ante los periodistas para responder frente a la famosa denuncia de los Rolex que fueron “prestados”, según la mandataria por su “Wayki” Wilfredo Oscorima, gobernador regional de Ayacucho. La conferencia dejó más evidencias de presunta corrupción y pocas respuestas claras.
Aquella vez tuvimos a Boluarte Zegarra con actitud tranquila ante los periodistas defendiendo cada uno de los cuestionamientos. Desde entonces solo hemos visto a la presidenta en actividades oficiales dirigiéndose al país y, en algunos casos, a los periodistas. Sin embargo, existen muchas preguntas sin resolver en estos meses y la mandataria no las ha tomado en cuenta a pesar de diferentes pedidos de todos los sectores.
En esa línea, cabe recordar que el país demanda más que conferencias y presentaciones en público. Recordemos que, además del caso Rolex, existen otros problemas que vinculan al Gobierno con diversas irregularidades. Por ejemplo tenemos el ‘cofre presidencial’ donde se tendría el posible encubrimiento a la fuga del fundador de Perú Libre, Vladimir Cerrón. También está el tema de los supuestos audios del ministro del Interior, Juan José Santiváñez y sus vínculos con el capitán PNP Junior Izquierdo ‘Culebra’.
Esperemos que desde el Ejecutivo se haga un cambio de timón con la finalidad de evitar más silencios que solo generan una imagen menoscabada frente a la población que necesita siempre respuestas adecuadas que son buscadas mediante el periodismo en general. La presidenta se lo debe al país.
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