¿Tienen sentido la aparición de diversas encuestas nacionales a dos años de las elecciones? Nos hacemos esta pregunta pues, de todo seguir en inercia, las próximas elecciones presidenciales serían el segundo domingo de abril del año 2026 y, en verdad, aún falta mucho para ello. Si es así, entonces el por qué de tanto adelanto para medir la voluntad popular. No tiene sentido.
Uno de los elementos más llamativos es el que tiene que ver con la disposición para preguntar por personas que aún no son candidatos. En efecto, ni uno de los mencionados, ni uno, es candidato. Es simplemente una posibilidad, que en primer lugar se tiene que someter a las primarias partidarias (que se realizarán dentro de un año) y luego, elegidos en democracia interna partidaria recién allí serán candidatos en firme. Es decir, podría darse el caso que alguno de los mencionados no sea elegido en las internas y así se frustraría toda la exposición mediática que ahora se tiene. Hay, todo parece indicarlo, una epidemia de irresponsabilidad.
Por otro lado se mide a personajes que técnicamente no podrían ser candidatos. Es el caso del sujeto vacado por corrupción e inhabilitado por 10 años por el Congreso de la República. Me refiero a Martín Vizcarra. No se entiende por qué se mide su posibilidad electoral sabiéndose que está inhabilitado. Lo mismo podríamos decir de Alberto Fujimori cuya candidatura no pasa de un buen deseo de su hija Keiko Fujimori y de uno que otro despistado de Fuerza Popular.
No queremos ingresar al terreno etario, de la edad de los candidatos, a pesar que se ha puesto en boga a raíz de la elección en Estados Unidos, pero sí de la falta de oportunidad de parte de algunas encuestadoras. Con este tipo de preguntas lo que logran es distraernos de verdaderos problemas nacionales como la ineptitud de Dina Boluarte, la creciente corrupción, la crisis económica y, como no, la ola de inseguridad que tiene en la ayuda que recibe de las alturas gubernamentales el prófugo Vladimir Cerrón tiene su máxima expresión.
Hay que darle a cada cosa su lugar. Y a pocos días de las fiestas de la patria lo que corresponde es evaluar el desempeño de quien ocupa la Casa de Pizarro en estos momentos. Ya habrá un tiempo para evaluar a los candidatos presidenciales. Y eso será todavía en unos meses, no por ahora.