Finaliza el año 2024 y damos inicio a un nuevo año, donde todos nos envolvemos en un abrazo y varios deseos, dentro de ellos prosperidad, éxito, tener mas dinero, suerte en el amor entre otros, realizamos varios tipos de cábalas, baños de florecimiento y diferentes acciones con las que creemos que todo cambiara al próximo año, producto de nuestros rituales y deseos.
Lo cierto es que si queremos un año diferente tenemos que cambiar de actitud, las decisiones pasan por nosotros y el destino lo escribimos de acuerdo a las acciones que realicemos a partir del 1 de enero, este año nos debe dejar grandes lecciones y aprendizajes para no cometer los mismos errores, buscar soluciones a los grandes problemas y no llenarnos de odio y generar división en nuestro país, debemos entender que las verdaderas transformaciones solo se darán si cambiamos la educación para formar ciudadanos responsables, con calidad humana y con capacidades que los haga ser competitivos en este mundo globalizado, los deseos son palabras de buena voluntad, las acciones son hechos reales, necesitamos cambiar esta realidad envuelta en corrupción, engaño, violencia, no atención a la salud, con carencia de trabajo y falta de oportunidades para desarrollarnos.
Mas que un deseo tenemos que comprometernos a un cambio dejando de lado las ideologías que tanto daño nos han hecho, el fanatismo y el sometimiento a unos cuantos que lo que han hecho es quitarnos nuestra verdadera libertad que es la esencia de la dignidad humana, con un estado injusto que cree que aumentando el salario básico solucionara los problemas mientras hay personas que ganan dinero sin trabajar.
El cambio no esta en llevar juguetes un poco de ropa usada y una chocolatada a la gente de escasos recursos económicos aprovechando la Navidad y el Año Nuevo a cambio de votos, el verdadero cambio se da cuando se trabaja para hacer una realidad distinta donde las personas sean valoradas y tengan oportunidades, no debemos dejarnos engañar una vez más con falsas promesas, la historia debe ser escrita por nosotros y los cambios debemos generarlos desde la sociedad, este año que viene debe representar lo que sentimos, trabajando más y no pidiendo feriados, cambiando nuestra actitud hacia lo malo con nuestro rechazo y construyendo una sociedad orientada hacia el bien común; el 2025 representa el inicio de una verdadera transformación para los peruanos, solo mediante la unidad podremos lograrlo caso contrario todo serán simplemente deseos de un día.