La presidenta Dina Boluarte no se cansa de intentar demostrar la “fortaleza” de su mandato. Lamentablemente, diversos hechos están socavando las intenciones de la jefa de Estado que, por todo lado, intenta llegar a la ciudadanía con un mensaje de estabilidad.
En ese camino, la mandataria apela a sus amistades. Aunque no tiene bancada, como ella misma señala, cuenta con “congresistas demócratas amigos” y en esa línea están algunos gobernadores regionales. Basta recordar a su famoso ‘Wayki” Wilfredo Oscorima, máxima autoridad en Ayacucho, a quien se le vincula con compras irregulares de regalos que coincidieron con el apoyo que brindó el Ejecutivo a esta región.
Ahora Dina Boluarte volvió a mencionar la palabra amigo. Esta vez para referirse al gobernador de La Libertad, César Acuña, alguien sobre quien pesan más dudas que certezas en torno a su conducta política. De igual manera llamó ‘amigos’ a algunos parlamentarios que le sirven de soporte.
Frente a ello solo queda aconsejarle a la presidenta que escoja bien a sus amistades. No resulta tan conveniente saber que existen aliados en un Congreso cuestionado por casos de ‘Mochasueldos’ y otras perlas. Tampoco es destacable tener como ‘amigos’ a gobernadores regionales sobre los que pesan denuncias y críticas de todo calibre. Bien dice el dicho: “Dime con quién andas y te diré quién eres”.
Así cierra el cuarto mes del año la presidenta Dina Boluarte. Hablando de amistades que, más que sumar, le restan en torno a las acciones que debe afrontar para conducir al país. Si es que no se dejan de lado esas declaraciones de amigos, lo único cierto es que no existirá la credibilidad suficiente y por tanto tampoco habrá la estabilidad que nos ayudará a crecer, todo por una serie de ‘amistades peligrosas’.
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