Una mujer de 34 años murió repentinamente mientras hacía ejercicio en un gimnasio de Mar del Plata, Argentina.
La víctima, Solange Abalos, madre de cuatro hijos, había retomado la actividad física hacía solo un par de semanas. Según la autopsia, sufrió un accidente cerebrovascular (ACV) hemorrágico que le causó la muerte inmediata.
Solange Abalos asistía con su amiga Marina a un gimnasio del barrio General Dorrego. Ambas habían decidido volver al ejercicio después de varios años, y como las dos tenían cuatro hijos y poca actividad física reciente, los profesores les asignaron rutinas suaves.
Solange fue a la cinta y Marina a la bicicleta. Luego pasaron a otra estación donde debían hacer tres series de 15 repeticiones. En medio de ese ejercicio, Abalos le dijo a su amiga que sentía "un tirón en la cabeza" y, segundos después, se desplomó.
Al verla caer, Marina pensó que era una broma, pero de inmediato notó que su cuerpo comenzó a ponerse morado. "El profesor llamó a la ambulancia y la pusimos de costado", relató. Aunque respiraba, lo hacía con dificultad. "Parecía ahogada. En unos minutos dejó de hacer fuerza para respirar", agregó.
Pese a los intentos del personal del gimnasio y del servicio médico privado por reanimarla, la mujer falleció en el lugar. El fiscal Alejandro Pelegrinelli está a cargo del caso, el cual quedó registrado como "averiguación de muerte".
La muerte de Solange Abalos, madre de cuatro niños, generó conmoción entre sus familiares y allegados. El ACV ocurrió mientras realizaba una rutina aeróbica ligera. La investigación está en curso y las autoridades buscan esclarecer los hechos registrados en el gimnasio de Mar del Plata.