El pasado 12 de julio fue una fecha que los arequipeños recordarán, ya que luego de tanta espera, por fin se logró firmar la adenda 13 del proyecto Majes Siguas II, con ello se suponía que los trabajos se reiniciarían después de haber permanecido paralizados por más de cuatro años con un 27% de avance, pero esto no sucedió.
En ese momento se habló de compromisos que se cumplirían de ambas partes, vale decir, la concesionaria Angostura Siguas y el Gobierno Regional de Arequipa (GRA). Entre estos acuerdos, la concesionaria debía acondicionar el campamento que instaló en el anexo de Pusa Pusa, también se debía retomar la fabricación de las dovelas en la plataforma de Chalhuanca, las mismas que se deben usar para la construcción del túnel Trasandino que debe ejecutar la tuneladora.
Estas debían ser las primeras obras, pero no se avanzó nada.
Además se indicó que la concesionaria debía comenzar con arreglar los caminos de los accesos para la obra de la primera fase, de igual manera debía presentar el expediente técnico n.° 2, así como su cierre financiero en un plazo máximo de 6 meses.
Por su parte, la Autoridad Autónoma de Majes (Autodema) tenía un plazo de 6 meses para la entrega del control del proyecto, es decir, los terrenos para la construcción de la presa Angostura.
TRISTE REALIDAD. Todo este precedente lamentablemente solo quedó en anuncios porque una vez más la concesionaria salió con excusas para retomar los trabajos.
En octubre argumentaron que por la temporada de lluvias no podrán trabajar y solicitaron que el plazo se extienda hasta febrero del 2023, además reclamaron que no les entregaron las tierras del Programa de Adecuación y Manejo Ambiental (PAMA) así como la no aprobación del expediente n.° 2 de la infraestructura hidráulica; similares excusas como las que quiso usar para resolver el contrato de concesión.
En ese momento, el gerente ejecutivo de Autodema, Arturo Arroyo, fue enfático al indicar que no permitirán más retrasos. “La concesionaria está intentando suspender las obras de la primera fase sin una justificación válida. Nosotros ya estamos contestándoles que no es posible”, dijo.
Luego, el 4 de octubre, Cobra presentó una carta a Autodema solicitando unilateralmente la suspensión del reinicio de trabajos que ya están paralizados 4 años. Una vez más Arroyo dio la cara para aclarar la situación. “Ellos siguen insistiendo y su intención es modificar el cronograma. Nosotros vamos a exigir que se respete. Las causales no son ciertas”, expuso.
Finalmente, ante la advertencia de la Contraloría, Autodema decidió no pagar los US$ 382 564 al consorcio especializado Majes II SAC debido a que identificaron un informe de servicio duplicado presentado en el año 2018 y por ello dieron a conocer que entablarían un trato directo, y si no llegaban a ningún acuerdo, procederían a un arbitraje para determinar si correspondería el desembolso, esto obviamente va a ocasionar un nuevo retraso.