Una fotografía tomada en Trujillo, donde Mario Vargas Llosa posa junto a su hija Morgana cuando ella tenía apenas siete años, sirve como punto de partida para la exposición Varguitas, la verdad de las mentiras. La muestra reúne imágenes del archivo familiar y retratos captados por Morgana durante los viajes que acompañó a su padre, revelando una faceta íntima del escritor y su profunda conexión con la familia y el oficio periodístico.
La exposición, instalada en el Centro Cultural Inca Garcilaso de la Cancillería, ofrece un recorrido visual por décadas de vida compartida, viajes y procesos creativos. Morgana recuerda que desde niña acompañaba a su padre a festivales y actividades culturales, como el Festival de la Marinera en Trujillo, donde ambos compartían el gusto por la música y las tradiciones peruanas. “Siempre lo acompañaba”, rememora, destacando la cercanía que marcó su relación.
Uno de los ejes más reveladores de la muestra es el trabajo conjunto que realizaron en zonas de conflicto. En 2003, padre e hija viajaron a Irak tras la caída de Saddam Hussein, experiencia que dio origen a reportajes publicados en El País y luego reunidos en el libro El diario de Irak. Para Morgana, fotoperiodista de carrera, fue una oportunidad de retratar el mundo en crisis y, al mismo tiempo, observar de cerca la rigurosidad periodística de Vargas Llosa.
La exposición también da cuenta del método creativo del nobel, que combinaba la escritura con la experiencia directa de los lugares que inspiraban sus novelas. Morgana relata cómo su padre recorría calles, conversaba con personas, tomaba apuntes y se impregnaba de los sonidos, olores y paisajes antes de convertirlos en ficción. Viajes a las Islas Marquesas, Francia, Londres, Arequipa y Lima formaron parte de esa búsqueda para obras como El paraíso en la otra esquina.
Finalmente, la muestra se convierte en un ejercicio de memoria y despedida. Morgana recuerda los últimos momentos compartidos con su padre, marcados por la lectura, la música y la vida familiar hasta el final. Varguitas, la verdad de las mentiras, de ingreso libre hasta el 12 de abril de 2026, no solo retrata al escritor consagrado, sino también al padre, al viajero incansable y al periodista que nunca dejó de observar el mundo con curiosidad.