Alonso Cueto presentó la edición de aniversario de su novela más celebrada, La hora azul (Alfaguara), obra con la que obtuvo en 2005 el Premio Herralde de Novela. La historia explora los años de violencia política en Perú y sigue a un abogado que descubre el secreto de su padre, oficial de la Marina, sobre una prisionera llamada Miriam.
Sobre su etapa actual como escritor, Cueto afirmó: "No he perdido la capacidad de comprometerme con una novela, con un proyecto algo voluminoso y largo que quiero escribir. Estoy ahora con una novela larga otra vez, también una novela ambientada en una época histórica diferente a la nuestra".
El autor recordó cómo renunció a su trabajo en El Comercio para dedicarse plenamente a escribir. "Muchos amigos me dijeron que era una barbaridad, que era una locura hacer eso... La otra persona que me apoyó fue Alfredo Bryce. Recuerdo haber hablado con él y me dijo eso es lo que tienes que hacer, que necesitaba todo el tiempo para escribir. Eso fue lo que hice y pasamos dos años muy duros, económicamente muy difíciles".
Sobre el origen de la novela y su acercamiento al conflicto armado, Cueto explicó: "Yo siempre había querido escribir sobre Sendero y la época de Sendero. Yo regresé de Estados Unidos en el año 1984... quería vivir acá porque justamente en esa época pasaban cosas. El conflicto, los contrastes, las diferencias, pues son la base de cualquier historia".
Cueto también reflexionó sobre la literatura y su estilo: "Ahora en el Congreso de la Lengua, al presentar el libro de Vallejo, dije que todos los escritores y todos los narradores deberían leer poesía, porque creo que la poesía te ofrece una concentración de lenguaje que te permite descubrir unos aspectos, unos niveles, unas posibilidades del idioma que solo la poesía te puede revelar".