La biblioteca pública Municipal de Arequipa se inauguró el 28 de julio de 1878 por iniciativa de Francisco Ibáñez Delgado que un año antes propuso su creación en el marco del reglamento de instrucción pública de 1876 que promovía la creación de bibliotecas en los centros de enseñanza, en el caso de Arequipa existía el colegio Independencia en la primera cuadra de la calle San Agustín por lo que crea una biblioteca pública adscrita a dicha institución.
En sus inicios este centro cultural dependía del Consejo Departamental de Arequipa, pero luego de los sucesos de 1883 durante la ocupación chilena de Arequipa y el retiro de las tropas del presidente provisorio Lizardo Montero, se produce un desorden en la ciudad y como consecuencia de ello ocurre el saqueo de la propia biblioteca.
Tras ello se propone que pertenezca al municipio provincial. El actual director, Rommel Arce desde 1878 la biblioteca ha tenido una continuidad inalterable hasta la actualidad.
PRIMER DIRECTOR. Fue un cargo honorario que asumió el coronel y doctor Trinidad Pacheco Andía, este personaje fue además autor de un himno dedicado al Combate del Dos de Mayo de 1866 y escribió un folleto sobre la historia del balneario de Mejía puesto que él fue uno de sus fundadores.
Además, se puede resaltar la labor de César Atahualpa Rodríguez quien dirigió la biblioteca por de 38 años hasta 1955, una vida dedica a los libros. Otro director destacado fue Enrique Azalgara Ballón un destacado filósofo arequipeño.
Este centro guarda las actas de cabildo que datan de la época colonial, esta documentación es valiosa para investigadores y población en general.
HEMEROTECA. Además, tiene una de las mejores colecciones de periódicos antiguos de la región sur, se cuenta con ejemplares como El Republicano de 1825 hasta 1855 que es el año que deja de emitirse, también está el diario “La Bolsa” con ediciones disponible desde 1864 hasta 1910. Asimismo se cuenta con registros del diario católico “El Deber” desde 1890 hasta 1964. Entre otros que siguen existiendo hasta la actualidad como el Peruano desde el siglo XIX.
DONACIONES. Entre los aportes más importantes, está aquella donada por el poeta arequipeño Alberto Hidalgo quien cedió sus libros personales a los arequipeños, este hecho de solidaridad está registrado en actas del Concejo Municipal hacia la década de 1970 y luego del historiador Mario Arenas Figueroa. Los interesados acudan a la biblioteca pues está disponible para todos.
FUTURO. Para su actual director Rommel Arce, la biblioteca tiene un porvenir lisonjero, pues este recinto del saber fue remodelado y recupera sus aires de grandeza. Por otro lado, quiere promocionar la cultura a través de programas “Yo leo con biblioteca itinerante” que recorre todos los distritos y busca generar una sociedad lectora.
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