Jorge vino a nuestra ciudad recorriendo el mundo sin más compañía que sus pertenencias y, en el mejro de los casos, su sombra. Sin embargo, su vida cambió cuando conoció a Casimiro, un minino que parecía sentenciado al abandono y la muerte por tener un ojo sobresalido.
Jorge y el gato se conocieron hace un año en la ciudad de Mollendo, mientras el indigente buscaba alimento en la basura y ahí encontró al felino flaco de mala apariencia con el problema visual.
El varón juntó 38 soles para viajar a Arequipa y llevar a su nuevo amigo a una veterinaria situada en el puente Bolognesi, Cercado. Al llegar, decidieron operar a la mascota y curarle todas las heridas, por tratarse de un caso social. Desde esa fecha Jorge y Casimiro se volvieron inseparables.
Así iban las cosas hasta el pasado 16 de marzo, cuando Jorge fue por agua para su mascota, se resbaló y cayó golpeándose la cabeza. El fatal accidente ocurrió debajo del puente Grau, en el Cercado. Serenos de la Municipalidad de Arequipa lo trasladaron a emergencia del hospital Honorio Delgado Espinoza donde falleció al día siguiente.
Su cuerpo permaneció en la morgue durante cuatro días hasta que unos vecinos del puente Grau hicieron colecta para proceder a la cremación y las cenizas fueron enviadas a Chile. Aunque Jorge físicamente ya no está con nosotros, seguirá velando como un ángel por Casimiro, así como pasó en los últimos seis años donde cuidó con un amor más allá de lo humano a su compañero de cuatro patas.
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